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  • Rubén

La comunicación dentro de las empresas minoritarias

La comunicación es un aspecto esencial de la vida, como también lo es del entorno laboral. Y, dentro del mismo, con las empresas minoritarias cobra una importancia aún mayor. Hoy, lo comprobamos en una vieja conocida de este blog.

En el día de hoy, vamos a analizar la comunicación dentro de una empresa de menos de 50 empleados que ya pasó por este blog, la turística 'Arawak', a través de una entrevista a uno de sus empleados más cotizados, Borja Sánchez. ¡Que la disfrutéis!

PREGUNTA: En primer lugar, ¿podrías decirnos exactamente cuál es la labor que realizas en tu empresa?

RESPUESTA: La labor que realizo en Arawak es dentro de ‘programación nacional’, algo a modo de coordinación entre todos los departamentos de la empresa que se dedican a programar viajes. Mi puesto es el de supervisor de retroplanning, que consiste en marcar todas las fechas en las que salen nuestros viajes y folletos a la venta, y estar en comunicación con todos los departamentos para saber cómo llevan su labor y qué va bien y qué va mal, y en base a eso, decidir qué medidas tomar.


P: Ahora, me gustaría que nos centrásemos en el ámbito comunicativo dentro de Arawak. ¿Cómo os comunicáis entre los distintos departamentos?

R: Hay diferentes niveles de comunicación entre los departamentos, y también dentro de los propios departamentos. Digamos que la comunicación entre departamentos en nuestra empresa depende de los jefes de cada uno. A ellos hay que comunicarles todo, y ellos, a su vez, van transmitiendo las decisiones que se toman en cada momento. Personalmente, cuando la comunicación tiene que ver con mi labor de retroplanning, voy directamente a hablar con cada jefe, pero lo demás debe ser a través de los propios jefes. Sin embargo, hay que decir que en ocasiones la comunicación entre jefes no funciona, porque alguno no llega a saber del todo algunas cosas de su propio departamento. En esos casos, las labores tienden a derivarse a otras personas, aunque no sea lo más ideal.


P: ¿Y entre los empleados de un mismo departamento?

R: En esos casos, la comunicación es bastante normal. Todos se comunican con todos sin ningún problema. Por ejemplo, si hay que tomar alguna decisión importante en un departamento, a no ser de que esté muy marcada la jerarquía, esa decisión se toma en conjunto y por consenso entre todos los integrantes. Aunque también depende del tamaño del departamento. Por ejemplo, en el caso de programación nacional, que no es un único departamento en sí, sino que está formado por grupos de programación internacional y nacional, que en muchas otras empresas no es así, estamos juntos, pero también funcionamos como unidades independientes. En programación nacional, normalmente, las decisiones las tomamos entre las tres personas que lo formamos. Si es algo importante, que va a afectar a otro nivel, se lo comunicamos a la jefa para que ella lo diga a los implicados, aunque en muchas ocasiones optamos por decírselo al Presidente, el nivel más alto que está presente en el lugar de trabajo.


P: Además de la comunicación directa entre jefes y empleados, que está clara, porque os veis en el lugar de trabajo, ¿hay algunas otras formas de comunicación de los directivos a los empleados?

R: Dependiendo de los empleados, los directivos suelen utilizar Skype para comunicar ciertas cosas, sobre todo con jefes o personas que no lo son, pero que sí tienen una cierta responsabilidad dentro del organigrama. Si no, se utiliza el email. Pero no se suelen utilizar otros canales.


P: Y, en el caso contrario, ¿cómo les comunicáis los empleados vuestras peticiones a los directivos?

R: Las peticiones sí que se suelen intentar hacer a través de los jefes de departamento, pero depende de lo que se vaya a comunicar. Si es algo a nivel departamental, sí, pero si es algo más personal, se intenta hacer directamente y en persona al directivo implicado o que corresponda. Depende también de la preferencia de cada persona. Pero, por jerarquía, el paso principal suele ser el jefe de la parte correspondiente, aunque hay veces que hay que saltárselo.


P: Dentro de esas peticiones de las que hablamos, hay un tema que me interesa especialmente: ¿hay espíritu sindical dentro de la empresa? ¿Los empleados os habéis intentado unir?

R: En nuestra empresa se ha intentado hacer una organización sindical hace poco, pero no salió adelante. En una organización como la nuestra, de menos de 50 personas, para hacer un comité, que es lo que se intentó, tiene que haber un total de votos a favor de la mitad más uno, pero no se consiguió, así que esa iniciativa se sustituyó, por iniciativa propia de una de las guías que están en nómina con la empresa, por una sección sindical. Pero ciertamente, el espíritu sindical no es para nada significativo en la organización. La razón es que hay mucha gente mayor, a las que les afecta cierta ideología, y no ven el tema sindical con muy buenos ojos, y casi que lo prefieren como algo más tapado, aunque lo respetan. Sin embargo, también hay que mirar los casos particulares, porque hay personas más atrevidas que otras, aunque puedan compartir grupo de edad.


A pesar de todo esto, a partir de la sección sindical que ha salido adelante, que lleva muy poco tiempo, va a intentarse tener una comunicación por parte de la delegada sindical más directa con los jefes, con el objetivo de que ninguna persona se exponga directamente a la hora de hablar de quejas o de peticiones de mejoras laborales, porque hasta ahora las iniciativas eran muy propias y personales.


P: ¿Consideras, en general, que el clima de trabajo es bueno?

R: El clima de trabajo siempre ha sido particularmente complejo, y ahora mismo no está pasando por un buen momento, por varias razones. La principal es que muchas de las decisiones que se están tomando no están siendo muy adecuadas, que benefician solamente a algunos jefes de departamento, y ni siquiera a todos. Los empleados no están saliendo muy bien parados, generalmente. La comunicación, por tanto, no es nada buena, y eso no ayuda al buen ambiente. Además, dentro de la empresa se suelen crear bulos y rumores que pasan por toda ella, y la información no suele llegar bien ni completa. Y no se está peleando porque eso cambie en estos momentos.


P: ¿La comunicación entre empleados o entre empleados y directivos se mantiene fuera de las horas de trabajo?

R: Fuera de las horas de trabajo, personalmente no suelo hablar con los compañeros. En alguna ocasión sí, en algún momento puntual, con un jefe porque, por ejemplo, necesita saber alguna cosa del trabajo, pero no es lo normal hacerlo. Al fin y al cabo, los empleados estamos allí casi todo el día, desde las 10 hasta las 7, así que hay tiempo de sobra para comentarlo todo y hablar de varias cosas, no solamente del ámbito laboral.

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